No
todas las adicciones son en esencia malas, en mi caso la lectura es un ansia
que tengo que controlar con relojes que me impiden leer más de una hora seguida
y que hacen que tenga que esperar un rato para que me permita el lujo de volver
a ella, haciendo así posible que haga otras actividades diferentes; hay amig@s
que se tienen que limitar los kilómetros que corren o andan en bicicleta porque
si no su práctica dejaría de ser sana y terminarían con lesiones crónicas, y
así muchas más que pueden pasar de virtud a defecto si se abusa de ellas. Pero
hay otras que desde el minuto uno son devastadoras para la persona que queda
atrapada en ellas, estoy hablando principalmente de las drogodependencias desde
el alcohol en grandes cantidades a las drogas tanto blandas como duras. Sé que
el hecho de que haya dado clase a personas que estaban enganchadas o que habían
conseguido salir de la fase destructiva pero que sabían que nunca más iban a
ser libres porque cualquier traspiés le llevaría de nuevo a lo más profundo del
agujero, hace que sea muy taxativo en mis opiniones, pero tan sólo tengo que
escuchar esta canción para saber que hay mucha verdad en mis palabras.
En
1.983 se funda Alarma!!! en
Madrid con varios componente de Cucharada como Manolo Tena (al que hemos
tenido en estas entradas) y José Manuel Díez, a los que se le une Jaime de Asúa en un grupo orientado al rock más puro y
clásico. Un año después lanzan su primer disco, Alarma!!!, que no tuvo demasiada repercusión por lo que deciden
pasarse a Polydor. Preparan con mimo un disco tremendo como es En El Lado Oscuro que ve la luz en 1.985
con temazos como Marilyn o sobretodo esta
desgarradora Frío, que les permite
ser teloneros del gran Miguel
Ríos (al que hemos tenido en estas entradas). Pero sienten que no tienen el reconocimiento suficiente y
deciden separarse para realizar carreras en solitario.
Muchas
personas pensamos que tras la metafórica letra se encuentra la desoladora
tristeza y desesperación de la drogodependencia
La
música empieza con unas poderosas notas de guitarra eléctrica secundada por la
batería y el bajo, que dan paso a la voz desgarrada, escasa y llena de
sentimiento del cantante. El interludio musical lo realiza un saxo demoledor
que acompaña el tema hasta el final.
©
Manolo Tena y Polydor.
Letra original |
El reloj de la suerte marca la profecía, deseo angustia sangre y desamor Mi vida llena y mi alma vacía, yo soy el público y el único actor Las olas rompen el castillo de arena, la ceremonia de la desolación Soy un extraño en el paraíso, soy el juguete de la desilusión Estoy ardiendo y siento, frío, frío Grito los nombres pero nadie responde, perdí el camino de vuelta al hogar Sé que estoy yendo pero no se hacia dónde, busco el principio y solo encuentro el final Las olas rompen el castillo de arena, la ceremonia de la desolación Soy un extraño en el paraíso, soy el juguete de la desilusión Estoy ardiendo y siento, frío, frío Termina el sueño suena el disparo, soy el delirio soy la confusión Soy solo un verso que está equivocado, mientras la muerte deja caer el telón. Las olas rompen el castillo de arena, la ceremonia de la desolación Soy un extraño en el paraíso, soy el juguete de la desilusión Estoy ardiendo y siento, frío, frío frío, frío frío, frío frío, frío |
Gracias Guillermo, te he encontrado de casualidad , eres genial . Gracias
ResponderEliminarMuchas gracias por tus palabras y esperamos poder ser merecedores de que nos sigas acompañando durante la aventura que es hacer este blog.
EliminarUn saludo