El
amor es algo tan especial que se deben producir miles de conjunciones
planetarias para que éste se presente en su forma verdadera y pura, y es tan
raro que en muchas ocasiones no se es consciente de su presencia ni aunque se
te cuele en tu cama. Pero a todas estas dificultades se le une el hecho de que
hay que estar preparad@ para asumir todo lo que ese don conlleva y que siempre
hay a nuestro alrededor personas que se encargarán de poner todas las cortapisas
a un sentimiento que ni comprenden ni pueden asumir que otr@s tengan. Y es
entonces cuando lo trágico hace su presencia con prohibiciones a verse para los
amantes, de paseos interminables con el único objetivo de poder verla/le por la
calle, de cartas que se sabe que no van a llegar su destino, de preguntar a
terceros por él/ella, y todo con la esperanza de que ese amor perseguido pero
no perdido renazca con valor y decisión, y de eso habla esta canción.
David DeMaría nació
en Jerez de la Frontera en 1976 en un hogar humilde que le encarriló a ser un
hombre de provecho y sacarse la FP de electricidad. Mas su corazón estaba
perdido en la música y desde los catorce formó parte de la banda Kelliam 71 en
la que se fogueaban en bares y locales de ensayo. Con 19 empieza su carrera en
solitario y en 1997 lanza su primer disco David
DeMaría que no tendrá demasiado éxito. Sus siguientes discos Soñar Despierto (1999) y El Color del Destino dos años después
tampoco alcanzan sus expectativas pero sí que le dan a conocer como compositor
para artista de la talla de Malú
(a la que hemos tenido en estas
entradas). Su éxito le llega en 2003 con el disco Sin Miedo A Perder donde posicionará en lo alto de las listas su
dúo con Antonio Orozco
(al que hemos tenido en estas
entradas) Pétalos Marchitos,
consolidándose un año después con Barcos
de Papel en la que esta magnífica Precisamente
Ahora será su sencillo de lanzamiento. Su fama no decrece en 2006 con
Caminos De Ida Y Vuelta que lo
confirman como una de las estrellas españolas del momento y aclamado por su
versión de flamenco y pop. Relojes De Arena en 2009, Otras Vidas en 2013 y
Séptimo Cielo en 2016 demuestran su relevancia y su poderío para llenar aforos.
La
letra nos habla de un amor que no pudo ser pero que no ha muerto, y en el que
los amantes se buscan por las calles para calmar su ansia y para consolar a
quien se quiere pero no se tiene.
La
versión que os ofrecemos está en el disco grabado en directos 20 Años y en el que el cantante se hace
acompañar por la mejor voz española, Sergio Dalma, que es
perfecto contrapunto ronco a la suya más cálida y aflamencada, mientras cuenta
con el apoyo de la banda reforzada por una sección de cuerda que da una fuerza
y emoción increíble a la melodía.
Página oficial
©
David DeMaría y
Warner.
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Letra Original:
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Precisamente
ahora que te he imaginado y en mi caminar…
precisamente ahora queda algo pendiente… precisamente ahora que cada mirada puedo recordar, te haces dueña de mi mente. Precisamente ahora que el Levante seca la ropa "mojá"… precisamente ahora, mira, ya no llueve… Precisamente ahora, pienso que tuvimos Niña que esperarnos… antes de tentar la suerte. No, no, nooo.
No
me llores más preciosa mía, tú no me llores más, que enciendes mi pena.
No me llores más preciosa mía, tú no me llores más… que el tiempo se agota entre lágrimas rotas por la soledad, que se cuela en nuestras vidas sin llamar…
Sin
llamar…
precisamente ahora.
Doy
vueltas por tu barrio casi "to" los dias sin desayunar…
me encuentro a tu familia y nunca se detiene… a saludarme. Yo busco entre la gente la cara más bonita que se pueda imaginar… por quererme sin tenerme. No, no, nooo.
No me llores más preciosa mía, tú no me llores más,
que enciendes mi pena.
No me llores más preciosa mía, tú no me llores más… que el tiempo se agota entre lágrimas rotas por la soledad, que se cuela en nuestras vidas sin llamar…
Que
el tiempo se agota entre lágrimas rotas por la soledad,
que se cuela en nuestras vidas, no habrá rincones pa’ las dudas ni habrá en tu noche oscuridad, no habrá reflejos de amargura juntitos volveremos a soñar. No me llores más, no, no, nooooo
¡No
me llores más preciosa mía! Tú no me llores más…
que el tiempo se agota entre lágrimas rotas por la soledad… que se cuela en nuestras vidas sin llamar… precisamente ahora… precisamente ahora. |
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