miércoles, 11 de marzo de 2020

Luz Casal – Ecos (letra en español)


Ni olvido ni perdón, eso es lo que creo que debemos sentir las personas de bien ante los atentados del 11M. En ese día unos malnacidos nos declararon sus enemigos porque el odio es la única idea que de verdad dirige sus vidas y rige su sinrazón. Esos malvados tienen razón cuando tratan de acabar con nosotros porque la existencia de un país donde la libertad es ley, donde las personas pueden pensar lo que quieran sin más freno que el de no tratar de imponerse por medio de la violencia, donde la mujer no es una esclava, donde sabemos que no somos perfec@s pero tratamos de mejorar día a día en la abolición de las desigualdades y en el respeto a las minorías, hace que para quienes sólo admiten que su fe o su ideología es la única verdad seamos el enemigo. Así que nos harán tanto daño como esa terrorífica mañana y nos provocarán tanta pena como lo que sentimos al escuchar esta canción, pero derrotarnos, eso no lo conseguirán jamás mientras sepamos lo que está en juego y dejemos a un lado lo que nos divide y nos centremos en todo lo que nos hace libres e iguales.

Luz Casal (a la que hemos tenido en estas entradas) nace en La Coruña en 1958 pero desde muy pequeña vivirá en diferentes localidades de Asturias donde aprende solfeo y canto y participa en varias bandas locales. En 1977 marcha a Madrid para continuar sus estudios y empieza profesionalmente en la música desde lo más bajo haciendo coros en estudio y acompañando en giras a cantantes del momento. Hasta 1982 no lanza su primer disco, Luz, en el que predomina el rock junto alguna balada suelta destacando el tema No Aguanto Más. Dos años más tarde edita Los Ojos Del Gato que pasa sin pena ni gloria. Empieza a ser conocida en 1985 con Luz III gracias a el tema paródico Rufino que será muy radiado. Dos años más tarde encontramos una de sus primeras grandes canciones como es Quiéreme Aunque Te Duela que va preparando el camino del éxito total que llegará en 1989 con Luz V, en el que encontramos temazos como Loca, Te Dejé Marchar, No Me Importa Nada, con el vende más de 300.000 discos sólo en España. Su popularidad se agranda con interpretación del bolero Piensa En Mí en la BSO de Tacones Lejanos y esa maravillosa Un Año De Amor (versión del clásico de Nino Ferrer Un An d'amour (C'est Irréparable)) siendo ya su reconocimiento mundial, y ese mismo año 1991 nos regala A Contraluz con maravillas como Es Por Ti o Un Pedazo De Cielo. Tras un descanso de cuatro años vuelve con Como La Flor Prometida que arrasa con 800.000 discos vendidos merced a temas como Entre Mis Recuerdos y Besaré El Suelo que le compuso Carlos Goñi (al que hemos tenido en estas entradas). En 1999 vuelve a conseguir el aplauso de público y crítica con Un Mar de Confianza del que destacamos Mi Confianza que le consigue el Premio Ondas y la tremendamente emotiva Sentir. Con Otra Mirada (2002) y sobretodo Sencilla Alegría (2004), donde encontramos esta versión de Ecos, suponen variaciones de su estilo acercándose al jazz, la copla y hasta el flamenco. En 2007 se le diagnostica un cáncer de mama, del que consigue recuperarse, y exorciza la enfermedad con Vida Tóxica, aunque tres años después en plena gira de presentación de su disco La Pasión tendrá que volver al quirófano y a la quimioterapia para volver a luchar, dándonos a tod@s una lección de entereza y fuerza. Tras Almas Gemelas de 2013, su último disco hasta el momento lo ha publicado este 2018 con el título de Que Corra El Aire y también le ha dado tiempo a colaborar con Depedro en Te Sigo Soñando.

La letra es la desgarrada historia de quien perdió el corazón por la explosión.



La música con unas notas tristes de piano que dan paso al bajo, a la guitarra que preceden a la voz llena de sentimiento y ternura de la cantante apoyándose en la batería.


© Bernardo Acosta y EMI.

Letra original
Recuerdo el día que
te fuiste una mañana de invierno
Subiste en ese tren
e hicieron de mi vida un infierno
Y los besos que entregué
te los llevaste demasiado lejos

Y me despierto en un vagón
ya me he pasado de estación
No me preguntes qué hago aquí
en las entrañas de Madrid

Puede que exista una razón
que me robara el corazón, el corazón
Mil noches y una más
tratando de escapar de un mal sueño
oyendo en soledad
el llanto de los ecos eternos

¿Cuánto tiempo ha de pasar
para sentir que ya no estás viviendo?
Y me despierto en un vagón
ya me he pasado de estación
No me preguntes qué hago aquí
en las entrañas de Madrid
en las entrañas de Madrid

Ecos eternos

Puede que exista una razón
que me robara el corazón,

Y me despierto en un vagón
ya me he pasado de estación
No me preguntes qué hago aquí
en las entrañas de Madrid

Y me despierto en un vagón
ya me he pasado de estación
No me preguntes qué hago aquí
en las entrañas de Madrid
en las entrañas de Madrid

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