Una
de las mejores cosas que nos está dando este blog a los que en él trabajamos,
es la revisión de mucha música que habíamos olvidado y también otra tanta a la
que habíamos arrinconado por prejuicios varios. En mi caso hay una serie de
artistas a los que en su momento admiré pero que un cambio suyo (que en
realidad casi siempre fue un problema mío) hizo que dejara de escucharlos, y
gracias a mi Tato hoy rescatamos a uno de ellos.
Carlos Goñi empezó a
actuar en 1980 dentro de varios grupos valencianos como Garage y Comité Cisne. En 1989
funda un nuevo grupo llamado Revolver (al que
hemos tenido en esta
entrada) basado en el más puro rock norteamericano y con elementos del rock sureño. Sus dos
primeros discos, Revolver y
Si No Hubiera Que
Correr, son una maravilla de guitarras potentes y letras demoledoras,
pero desgraciadamente el público no estaba preparado para ello, por lo que
durante la promoción los conciertos los realizan en pequeñas salas en formato
acústico por su menor coste. La MTV estaba buscando un artista con el que
empezar la grabación de sus MTV
Unplugged en España y el alicantino les vino de perlas. Su Básico
será un bombazo en el mercado nacional y desde los medios se le denominará el Bruce Springsteen
español (al que hemos tenido en esta,
esta,
esta,
esta
y esta
entradas), lo cual le encanta ya que es uno de sus ídolos, pero su El Dorado, que
es un descarado homenaje al de New Jersey, en mi opinión adolece de algunos de
los defectos del yanqui y pocas de sus virtudes. Pero soy de los pocos que
piensan así, porque será un superventas y le consolida como una de las figuras más
importantes de la música española del momento. Con este LP y el siguiente Calle Mayor, realiza
Básico 2 que será
otro gran éxito y donde está incluida la canción que hoy os traemos. En este
siglo ha publicado discos que han vuelto a sus orígenes con obras como Mestizo o Babilonia y
otros con claras influencias magrebíes como Argán.
La
letra nos habla de esa conjunción cósmica que da al que nada tiene todo lo que
jamás pudo soñar, un amor en el que la pasión se une a la comprensión, haciendo
que sepas que desde esa noche tu vida tiene más de lo normal.
La
música es muy simple una armónica, una guitarra, una voz potente, y nada más
porque nada más precisa para hacer una bella canción si hay arte y oficio.
© Carlos Goñi y Warner.
Letra Original:
|
Esta
noche tengo más de lo normal
y tu cuerpo se me antoja el eslabón entre la tierra y el cielo, lo real de lo irreal esta noche tengo más de lo normal. Debe ser que por fin soy siguiente en lista de espera de sujetos a ayudar en esta maltrecha espera y te han puesto encima mío para siempre y por jamás esta noche tengo más de lo normal. Y bañarnos en sudor hasta que no brote más de tu piel y de mi piel conversar hasta morir y volver a conversar hasta pegarnos la lengua al paladar. Conversar hasta morir y volver a conversar hasta pegarnos la lengua al paladar. Y es por eso que esta noche tengo más de lo normal y prometo hacerte socia de mi piel de mi sangre y de mis huesos pues no tengo mucho más esta noche tengo más de lo normal esta noche tengo más de lo normal. |
No hay comentarios:
Publicar un comentario