Ya
estamos en Julio, todas las poblaciones ya se han puesto en modo fiesta. Las
verbenas crean un circuito que se sigue a nivel provincial y regional, haciendo
que siempre sea posible encontrar una localidad en la que los banderines vistan
sus calles, las atracciones encuentren una plaza que poblar, la venta ambulante
te ofrezca productos delirantes a precios desorbitantes, y la música disponga
de su rincón para sonar y atronar. Y allí encontraremos lo más cutre y vomitivo
junto a lo más emocionante y sublime en tan sólo dos pasos de separación, y de
repente tus grabadora de recuerdos se pondrá en funcionamiento porque es aquí
donde se encuentran las hebras con la que se crean los sueños. Y si hay una
canción que narra a la perfección éste espíritu es la que hoy os ofrecemos.
Enrique Sierra formó
parte del principal grupo punk
español que fue Kaka De
Luxe. Tras su disolución, en 1979 decidió aceptar la invitación de Herminio Molero para crear
una banda que fuera la traslación del new wave británico a España a
la que llamó Radio Futura
(a los que hemos tenido en estas entradas). Aunque un año después su primer disco, Música
Moderna, tuvo un notable éxito de público y servirá de impulsor les
encuadrará como uno de los estandartes de la Movida Madrileña,
provocará fuertes tensiones internas entre los componentes de la banda por el
excesivo intervencionismo de Hispavox. Al final sólo quedarán él, Santiago Auserón,
Luis Auserón, y
Solrac Velázquez que durante dos años sólo publicarán sencillos para terminar
el contrato con la discográfica, entre los que estará el mítico La
Estatua Del Jardín Botánico. En 1984 termina su suplicio y fichan con
Ariola con la que lanzan La Ley
Del Desierto/La Ley Del Mar donde alternan temas funky como Escuela de
Calor, con otros que serán el preámbulo del desembarco rock latino en España como Semilla Negra. Su
éxito les permite que para la creación un año después de De Un
País En Llamas se les presten todos los medios técnicos y las
colaboraciones que pidan, siendo el resultado un disco excepcional en el que
conviven temas de tan diferentes estilos como Han Caído Los Dos, El Tonto Simón o No Tocarte, pero
es esta diversidad la que explica sus menores ventas ante la confusión de sus fans.
Aprendida la lección, su siguiente trabajo, La Canción De
Juan Perro (1987), tenga una identidad claramente enfocada al rock latino del que será uno
de sus discos fundamentales como esta El
Canto Del Gallo, aunque también tenga su hueco ésta más popera Annabel Lee.
Su último disco de estudio, Veneno En La Piel,
editado en 1990 será al mismo tiempo su mayor éxito de ventas merced a
sencillos como Corazón De Tinta
o Veneno En
La Piel, y su epitafio al demostrar a las claras la diversidad de
criterio artístico de los miembros del grupo, por lo que en 1992 deciden su
disolución pero sin dejar por ello de colaborar todos en las carreras
individuales de cada uno de los integrantes de la formación.
La
letra nos habla de las fiestas de un pueblo, con sus alegrías, sus excesos, y
cómo al terminar el músico se marcha a la siguiente función donde encontrará
una nueva señorita a la que tentar.
Enlace vídeo El Canto DelGallo
La
canción arranca con unas notas leves de la sección de viento apoyadas por la
batería, al que le unen los teclados, el bajo y laguitarra que dan paso a la
personalísima y clara voz del cantante en esta música mezcla del pop latino y
el reggae.
©
Santiago Auserón,
Luis Auserón y Ariola.
Letra original |
El jaleo de los días de feria ya se oía a un kilómetro del pueblo y un extraño acento en el hablar de los que halló por el camino Un coro de muchachas y una vieja levantándose las faldas al bailar y un jovencito de broma peligrosa haciendo gala del orgullo local De los que dan dinero por la noche para que nunca termine su canción para que sude el músico ambulante su condición de vagabundo Es ya la hora del aperitivo y todavía no funciona el tiovivo el músico buscó la acera en sombra y la ventana donde olía a flor Tenga esta rosa blanca, señorita a cambio de su negro pensamiento por qué motivo temblaron sus labios vio en sus ojos el fondo de un volcán Y mientras tanto corría la sangre en la plaza, como un vino común y las plumas de los gallos por el aire volaban aun Quítese usted de en medio forastero que ya no quedan señoritas en el bar ya cantó como el gallo de pasión pero esta es mi canción y el baile va a empezar El músico ambulante se agarró del vaso y sintió que flotaba en la luz artificial apuró el trago de madrugada un borracho imitaba el canto del gallo Se deslizó por una callejuela antes de que empezase a clarear y al pasar por la ventana enrejada suavecito empezó a silbar Pero nadie conocía la tonada que era inventada para la ocasión y se fue por el camino a contemplar los desvelos de las ultimas sombras Y caminando iba pensando que ganar siempre es tentar a la otra cara de la suerte y que por eso te hacen daño los huesos cuando golpeas fuerte Y así se fue chasqueando los dientes en memoria de algún actor cuyo nombre se ha perdido y que hacía de bandido Y sintió la alegría del olvido y al andar descubrió la maravilla del sonido de sus propios pasos en la gravilla |
No hay comentarios:
Publicar un comentario