Los
propios autores crean confusión sobre lo que trata esta canción ya que unas
veces hablan del sentimiento ante la pérdida del ser amado y otras veces del
vacío cuando se dejan las drogas, pero en ambos se deja traslucir la atracción que
ambas adicciones les siguen provocando aun cuando ese momento pasó. No voy a
hablar de lo imposible que es escapar del amor ya que es casi la razón de ser
de este blog, tanto para bien como para mal, je, je, pero sí que me quiero
referir al mundo de la drogadicción y cómo mucha gente piensa que es una
habitación de la que es fácil salir. Por mi profesión trato con personas que
están en diferentes fases de la drogadicción y os aseguro una cosa, tras casi
treinta años de escuchar las experiencias de bastantes personas, una vez que se
da el paso con las drogas el futuro está en muy serio peligro. Ayer mismo he charlado
con un chaval de 22 años que está en tratamiento de rehabilitación por consumo
de cannabis y alcohol, y que, gracias a su novia y a su madre, está saliendo
del hoyo pero que ha tenido que dejar los estudios, saber que en los talleres
ya se ha corrido la voz de que es problemático y abandonar a sus amistades
porque le llevaban a la ruina, pues me confesaba que si le ofrecen volver a
consumir no se veía con capacidad de resistir, esa es la cruda realidad.
En
1966 Eric Clapton (al
que hemos tenido en estas entradas) era un reputado guitarrista dentro de John
Mayall And The Bluesbreakers pero quería dar un giro a su música desde al blues rock al pujante rock psicodélico,
y en una conversación con el baterista Ginger Baker deciden
crear Cream (a los que hemos
tenido en estas entradas) con la colaboración de su antiguo compañero en The Graham
Bond Organisation el bajista Jack Bruce. Un año después
lanzan Fresh Cream que con I Feel Free tendrán un
enorme éxito en el Reino Unido. Ese mismo año se van de gira a EE.UU. donde son
aclamados y deciden meterse a grabar ya su segundo LP, Disraeli Gears, que
contendrá su canción más conocida, Sunshine Of Your Love,
que llegará al Top 5 de las listas americanas. Ante la enorme expectación
que habían creado en 1968 graban el doble Wheels Of Fire que
será número uno de ventas en medio mundo merced a esa brutalidad sonora del rock psicodélico
que es esta White Room o su versión
de Crossroads.
Las tensiones entre el baterista y el bajista y las ganas del guitarrista por
probar sonidos nuevos hace que un año después publiquen Goodbye
como despedida y disuelvan la formación dejándonos otra maravilla como es Badge que será su
único número uno en las listas británicas.
La
letra nos habla de la sensaciones que se tienen cuando una adicción entra y
sale de tu vida.
El
arranque es tremendo con los coros, los teclados disonantes, el bajo potente y
la percusión poderosa que dan paso a la voz de Jack Bruce que alterna el
tono grave con el de cierto falsete mientras la guitarra en distorsión de Eric Clapton hace magia, y
ya el solo final es canela fina.
© Jack Bruce, Pete Brown y Atco
Records.
Letra original |
In a white room with black curtains near the station Black roof country, no gold pavements, tired starlings Silver horses ran down moonbeams in your dark eyes Dawnlight smiles on you leaving, my contentment I'll wait in this place where the sun never shines Wait in this place where the shadows run from themselves You said no strings could secure you at the station Platform ticket, restless diesels, goodbye windows I walked into such a sad time at the station As I walked out, felt my own need just beginning I'll wait in the queue when the trains come back Lie with you where the shadows run from themselves At the party she was kindness in the hard crowd Consolation for the old wound now forgotten Yellow tigers crouched in jungles in her dark eyes She's just dressing, goodbye windows, tired starlings I'll sleep in this place with the lonely crowd; Lie in the dark where the shadows run from themselves |
Letra traducida |
En una habitación blanca con cortinas negras cerca de la estación País de techos negros, sin pavimentos dorados, estorninos cansados Caballos de plata corrieron rayos de luna en tus ojos oscuros La luz del amanecer te sonríe al irte, mi alegría Esperaré en este lugar donde el sol nunca brilla Esperaré en este lugar donde las sombras huyen de sí mismas Dijiste que ninguna cuerda podría sujetarte en la estación Billete de andén, diesels inquietos, ventanas de despedida Entré en un momento tan triste en la estación al salir, sentí que mi propia necesidad apenas comenzaba Esperaré en la cola cuando los trenes vuelvan Acuéstate contigo donde las sombras huyen de sí mismas En la fiesta ella fue la bondad en la dura multitud consuelo para la vieja herida ahora olvidada Tigres amarillos agazapados en selvas en sus ojos oscuros Ella sólo se viste, ventanas de adiós, estorninos cansados Dormiré en este lugar con la multitud solitaria Acuéstate en la oscuridad donde las sombras huyen de sí mismas |
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