En
esto de los romances qué bien nos iría a tod@s si alguien hiciera un manual de
instrucciones medianamente veraz. Cuando estás en los años de adolescencia (que
a algunos todavía nos dura) transitas por bares y demás antros intentando que
las féminas que por allí pululan se fijen en ti y te den esa señal con la que
empezar la conversación (porque al menos en Palencia como seas tú el que las
“entres” te vuelves a casa como el gallo de Morón)
porque sabes que son ellas las que tienen el control, las que con un no te
dejan más planchado que un sello, y no te queda más remedio que aceptarlo así,
porque ya sean monárquicas o republicanas todas se saben princesas.
Pereza (a los que hemos
tenido en esta
entrada) se funda oficialmente en 2001, aunque Leiva y Rubén Pozo ya llevaban tres
años juntos haciendo versiones de clásicos del rock de grupos nacionales
como Leño o Extremoduro. Un
cazatalentos les ficha para RCA atraído por su potente directo y les edita su primer
disco en 2001, Pereza, que no
tuvo demasiada repercusión en el gran público, pero que sí que les proporcionó
la oportunidad de dar más de cien conciertos en locales de cierto aforo y de participar
en el disco homenaje de Hombres
G donde su versión de Voy A Pasármelo
Bien fue bastante radiada. Un año después graban su segundo disco Algo Para Cantar, que
les empieza a dar a conocer y les permite ser teloneros de Bon Jovi (a los que hemos
tenido en esta
entrada). En 2005 Animales se
convertirá en un superventas gracias a temazos como Todo, Lo Que Tengo Yo Dentro o esta Princesas. Tras más de doscientos conciertos en dos años lanzan Aproximaciones con
el que consiguen que la crítica deje de llamarles los nuevos Tequila (a los que
hemos tenido en esta
entrada) o los The
Rolling Stones (a los que hemos tenido en esta,
esta
y esta
entradas) españoles para fijarse en la fusión de estilos que podemos encontrar
en temas como Estrella Polar o Tristeza. En 2009 vuelven a dar un giro
a su estilo y apuestan por lo acústico en Aviones, que volverá
a contar con el aplauso de público y crítica, pero dos años más tarde anuncian
que van a dar un parón temporal al grupo para dar una oportunidad a sus
carreras individuales, y ya llevamos cuatro años sin que se vea que vayan a
volver, una pena.
La
letra nos habla de la búsqueda de una sonrisa en un bar que te abra las puertas
a un te quiero y pasártelo bien trasnochando. Y aunque ahora es tan famoso que
sale en el As lo que sigue buscando es a esa Princesa que le añada a su
colección.
Esta
canción es un tributo a la capacidad multi-instrumentista de ambos ya que son
los que interpretan tanto la batería, la guitarra como el bajo.
Página oficial
©
Leiva, Rubén Pozo y BMG.
Letra Original:
|
Sigo
buscando una sonrisa de repente en un bar,
una calada de algo que me pueda colocar, una película que consiga hacerme llorar, ahá... Cambiar un “no me creo nada” por “te quiero, chaval”, cualquier excusa, una chorrada, es buena para brindar soltar en una carcajada todo el aire y después respirar.
Sentirme
como una colilla entre unos labios al fumar,
colgarme de cualquiera que le guste trasnochar, qué inoportuno fue decirte “me tengo que largar”, pero qué bien estoy ahora, no quiero volver a hablar
De
princesas que buscan
tipos que coleccionar a los pies de su cama, eres algo que he olvidado ya
Ando
silbando me paro con la gente a charlar,
me tomo algo, sonrío y me lo vuelvo a tomar, escucho música y me pongo a bailar. Sigo flipando cuando veo mi cara en el As, últimamente las cosas cambian cada vez más, a veces pienso que algo malo viene detrás.
Me
siento como una colilla entre unos labios al fumar,
me cuelgo de cualquiera que le guste trasnochar, qué inoportuno fue decirte “me tengo que pirar”, pero qué bien estoy ahora, no quiero volver a hablar
De
princesas que buscan
tipos que coleccionar a los pies de su cama, eres algo que he olvidado ya
Sigo
buscando una sonrisa de repente en un bar,
una calada de algo que me pueda colocar, una película que consiga hacerme llorar...
De
princesas que buscan
tipos que coleccionar a los pies de su cama, eres algo que he olvidado ya |
No hay comentarios:
Publicar un comentario